AUSTIN – El jueves el Concejo Municipal de Austin aprobó una ordenanza con onerosas regulaciones para escuelas públicas/chárter, afectando negativamente a estudiantes del área y prácticamente dando fin a la capacidad de estas escuelas para crecer y expandirse en la ciudad. La ordenanza carga a escuelas públicas/chárter de inscripción abierta con reglamentos de urbanismo que nunca antes se aplicaron a una escuela chárter pública y están claramente diseñados para prevenir su expansión.

"Hay una tendencia en el Concejo Municipal de Austin en este momento de regular en exceso todo negocio que es exitoso, popular y que propera sin ayuda del gobierno. Habiendo ya restringido la libertad de los residentes de Austin para participar en servicios de transporte independiente (como Uber) y rentas de corto término, la Ciudad se enfoca ahora en estudiantes que no optan por escuelas públicas tradicionales", dijo la Senadora Campbell. "Votar ahora en el verano cuando padres, maestros y estudiantes no están para protestar hace este acto en particular aún más cobarde".

La Legislatura creó las escuelas públicas/chárter para ofrecer una educación única, personalizada y flexible a los niños que podrían no cubrir sus necesidades en escuelas públicas tradicionales. Las escuelas públicas/chárter no reciben dólares de impuestos para sus instalaciones, no pueden tener elecciones para bonos, y no pueden entrar en acuerdos de Desarrollo de Tierras con municipalidades, poniéndolas en desventaja con respecto a los distritos escolares independientes (ISDs). También reciben en promedio $1,000 menos por estudiantes de parte del estado. A pesar de estas restricciones, son sumamente populares, con una lista de espera a nivel estatal de más de 110,000 estudiantes.

"Las escuelas chárter son exitosas, populares y eficientes precisamente porque siguen un modelo no tradicional que no depende de onerosas instalaciones y grandes establecimientos. Forzarlas a cumplir requisitos de urbanización y actuar como los ISDs tradicionales es como forzar a trailas de comida a brindar y pagar por salones de banquetes", dijo la Senadora Campbell.

"Esta ordenanza es un ataque a familias de comunidades que son insuficientemente servidas y dependen de escuelas chárter. La Ciudad de Austin no solo está restringiendo su acceso a una buena educación sino que está afectando negativamente la futura fuerza laboral de esta ciudad y nuestro gran estado".

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