AUSTIN – El Senado de Texas votó hoy 30 a 0 por su versión de la HB 3158, un plan que restituiría la solvencia financiera del disfuncional Fondo de Pensiones a Policías y Bomberos de Dallas. La aprobación de la propuesta se da después de semanas de intensas negociaciones dirigidas por el Senador Estatal Royce West (D-Dallas), luego que la medida de la cámara baja, del Diputado Dan Flynn (R-Canton), presidente del Comité de Pensiones de esa cámara, fuera aprobada el 4 de mayo. La gran cantidad de proponentes de la HB 3158 --representando a policías y bomberos activos, jubilados y a la Municipalidad de Dallas--lograron llegar a un acuerdo con solo una semana para que termine la Sesión Legislativa de 2017.

"Todas las partes involucradas lucharon por sus propias perspectivas y contra lo que es la dura realidad", dijo el Senador West. "Basicamente, el plan, de la manera que existe, es financieramente insostenible y no podría continuar sin cambios. La verdad es que cada parte tuvo que hacer concesiones para llegar a un acuerdo en medidas que: 1) aporten certeza a los jubilados, 2) sean financieramente razonables para la Municipalidad de Dallas, y 3) no sobrecarguen a los contribuyentes, que no tienen culpa de la situación actual del plan pero al final tendrán que pagar por la solución".

Los problemas en el plan de Pensiones a Policías y Bomberos de Dallas vienen desde hace mucho pero explotaron en 2016, cuando la directiva actual del plan permitió extracciones masivas de parte de miembros. Sin control, los analistas dicen que el plan iría a la bancarrota en menos de un año. Dada la actual situación de insolvencia del plan y el bajo rendimiento de sus inversiones, aún la estimación más conservadora dice que el plan sería insolvente en 10 años o menos. El Senador West dice que los aportes de su colega, el Senador Don Huffines de Dallas, ayudaron al avance en tensas negociaciones.

Bajo la versión senatorial de la HB 3158, el fondo de pensiones pasará de su actual insolvencia a una solidez actuarial en una proyección de 46 años. El plan pide a la Municipalidad hacer una contribución anual mínima de $13 millones durante siete años. En ese momento, la medida ordena una inspección actuarial para determinar si el plan está rindiendo como fue proyectado, y medir si la contribución municipal debería aumentar o puede ser reducida. La Ciudad tendrá capacidad de hacer los ajustes necesarios para asegurar la viabilidad del plan, pero todo cambio importante deberá tener la aprobación de dos tercios de los votos de miembros directivos del plan.

Los críticos señalan un tema de administración que permitió a miembros del plan obtener el control de la dirección y culpó a la Ciudad por errores en la supervisión. Bajo la HB 3158, la Ciudad de Dallas obtendría una mayoría de 6/5 en la directiva. Con la aprobación senatorial, la HB 3158 volverá a la cámara baja para un voto que reconcilie las diferencias entre las dos versiones. Dependiendo del acuerdo entre las dos cámaras, la medida sería enviada al Gobernador Greg Abbott para su aprobación final.

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