DE DIFUSIÓN INMEDIATA
Junio 15, 2001
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La Sesión 77° de la Legislatura de Texas terminó hace unas semanas, y es ahora tiempo de volver adonde se encuentran diariamente las verdaderas estrellas del estado. Para todos nosotros que pasamos los pasados cinco meses en el Capitolio, nuestros esfuerzos serán últimamente juzgados por ustedes, los ciudadanos de Texas.
Son ustedes los que crean el ambiente que determina las medidas presentadas a consideración. Son ustedes los que están en posesión del compás moral que determina la dirección en que Texas debe moverse. Son ustedes los que deciden quién retornará a Austin en 18 meses para representar y proteger sus intereses.
Creo que ustedes, los ciudadanos de Texas, pueden estar orgullosos del producto de la Sesión Legislativa 77°. Porque en esta sesión –más que en ninguna otra que yo recuerde—la protección de los derechos de los ciudadanos se erigió como tema recurrente en muchas de las medidas aprobadas.
Exploramos varias áreas de derechos civiles y legislación enfocada en apoyar a la familia.
He escrito y hablado innumerables veces desde el comienzo del año sobre la necesidad e importancia de una ley que prohiba la práctica del perfilado racial hecho por la policía. Como integrante de población minoritaria, no debería depender de mi visibilidad como funcionario electo para confiar en que no voy a ser tratado de manera diferente al conducir por carreteras y caminos de Texas, o, por extensión, en ninguno de los 50 estados de esta Unión. Texas se ha unido ahora a otros nueve estados que han establecido por medio de estatutos que la raza no puede ser un factor que dicte si un individuo es o no detenido, requisado o arrestado por los representantes de la ley. Tal decisión debería basarse únicamente en una sospecha de actividad ilegal.
Estoy igualmente orgulloso de que, después de un casi hercúleo esfuerzo, el Acta James Byrd Jr. contra Crímenes de Odio ha sido promulgada en ley. Los esfuerzos por aprobar una ley que proteja los derechos de todos los ciudadanos contra actos maliciosos motivados por odio o prejuicio han llevado casi toda una década. Independientemente de la raza, grupo étnico, nacionalidad, afiliación religiosa, incapacidad u orientación sexual, todas las personas pueden ahora sentirse seguras de que los actos de violencia infligidos en su persona, cuando se halla que la motivación ha sido odio o prejuicio, serán penalizados rígidamente.
Es mi creencia que aquellos que cometen actos criminales deberían sufrir el castigo apropiado. Pero es mi deber, y el de todos aquellos involucrados en nuestro sistema de justicia, el estar vigilantes para que las personas inocentes no se conviertan en víctimas. Con esto en mente es que cree el Proyecto de Ley Senatorial 133, que dice que la raza no puede ser usada en la corte como factor de predicción de futuro comportamiento criminal.
Bajo esas mismas pautas, aquellos que son inocentes no deberían arriesgar su libertad por falta de una representación legal adecuada. La defensa de indigentes en este estado es al momento un sistema no sujeto a estándares o aplicación a nivel estatal. Mientras que en áreas urbanas es más fácil acceder a una asistencia legal nombrada por la corte, en áreas rurales esa asistencia no siempre está disponible dentro de un período adecuado. En esta Sesión, logramos aprobar una medida que establece un sistema uniforme y a nivel estatal para proveer asistencia legal a aquellos que no pueden pagar un abogado.
Esta medida, junto con el Proyecto de Ley Senatorial 133, fue promulgada en ley por el Gobernador Rick Perry hace unos días.
Hubo una declaración hecha durante las elecciones del 2000, de que ninguna persona inocente ha sido sujeta a la pena de muerte en este estado. Una medida aprobada esta Sesión remediará, esperamos, esa inherente duda. El Proyecto de Ley Senatorial 3 –ya promulgado en ley y efectivo inmediatamente—proveerá la recolección y preservación de evidencia que contenga ADN. La evidencia de ADN estará disponible para exámenes posteriores a la sentencia en casos de crímenes capitales.
Una medida aprobada por la Legislatura todavía espera, a la hora de escribir estas líneas, la firma del gobernador. Esta se refiere a si las personas incapacitadas mentales deberían o no ser sentenciadas a muerte. El caso del tejano Johnny Paul Penry, convicto del asesinato de Pamela Moseley Carpenter en 1979, ha producido un interés nacional. Las implicaciones de leyes actuales y pendientes han creado un debate moral considerable.
Las bases de América se sientan en uno de sus pilares básicos: la familia. En esta Sesión, logramos aprobar y ampliar legislación que mejorará la salud de los niños y ayudará a solidificar los lazos familiares.
El Proyecto de Ley Senatorial 43 simplifica el proceso de solicitud para aquellos padres cuyos hijos necesitan asistencia médica de Medicaid. También facilita la transición a una cobertura del Programa de Seguros Médicos para Niños (CHIP). Creado durante la Legislatura 76°, CHIP provee cobertura médica a niños de hogares con ingresos familiares que exceden los límites de Medicaid pero no pueden adquirir una cobertura privada. La financiación de CHIP se incrementó en esta Sesión.
Todos sabemos de niños que –debido a varias circunstancias—no viven con sus padres biológicos pero cuentan con un hogar seguro con sus abuelos. Esto a veces crea dificultades financieras, una situación a la que me referí por medio de legislación durante la Sesión 76°.
El Proyecto de Ley Abuelos provee a estos abuelos un subsidio único de 1.000 dólares, para asistirles en los costos de la crianza de sus nietos. En esta sesión, el límite de edad para abuelos elegibles bajó de 50 a 45 años de edad, y desde el 1° de septiembre del 2001, el ingreso permitido por hogar aumentará del 100 al 200 por ciento de los niveles de pobreza federal.
Recientemente celebramos el Día del Padre, y ahora el Estado de Texas querría alentar a más padres para que asuman sus obligaciones con los hijos. Una medida de la que fui autor limitará el pago de pensiones a menores a cuatro años, si el padre cumple con los actuales pagos mensuales por sustento a menores. ¿Porqué tal medida? Porque en algunos casos, se crea una obligación casi imposible para que un padre cumpla con su responsabilidad, por ejemplo, cuando éste desconocía su paternidad.
Medidas aprobadas durante esta sesión implementarán un programa de medicinas bajo receta para aquellos clientes de Medicaid que demuestran necesidad, o son ancianos o incapacitados. En este país de grandiosa prosperidad, deben implementarse medidas de asistencia a aquellos no tan afortunados.
Finalmente, los ancianos y otros que han caído presa de la extendida práctica de préstamos con intereses rapaces, contarán con la asistencia de una ley estatal que proveerá la revelación de los préstamos para propiedad con costo elevado.
Royce West Senado de Texas
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