En el Día del Trabajo reconocemos a los trabajadores de nuestro gran estado y nación, y rendimos honor a su sacrificio, dedicación y compromiso por mantener a nuestras familias sanas, nuestros niños educados, nuestro suministro de alimentos abastecido, y nuestra economía activa. Este Día del Trabajo, más aún que los pasados, entendemos cuán críticos son en nuestra vida diaria los trabajadores esenciales --como médicos, maestros, enfermeros, personal de limpieza, trabajadores de emergencias y de alimentación, solo por nombrar algunos. Estas personas toman la diaria decisión de que la salud y bienestar de sus comunidades están por delante del mayor riesgo que enfrentan en sus empleos. Aunque deberíamos agradecer a todos los trabajadores diariamente, hoy quiero expresar mi profunda gratitud y aprecio por el trabajador americano, de parte de todos los que dependemos de ellos día a día.
Todos reconocemos que toda persona en este país pasa por dificultades considerables debido a la pandemia de COVID-19. Este virus nos ha forzado a tomar decisiones difíciles: ¿iré al supermercado para comprar lo que necesito? ¿mandaré a mis hijos a la escuela o guardería? ¿estaré seguro visitando a mis seres queridos?
Aunque estos desafíos han sido sumamente difíciles para todos nosotros, los trabajadores, especialmente los esenciales, tienen la carga extra de enfrentar una mayor exposición a diario, y preocuparse por si traen el virus a casa y sus seres queridos. Los paramédicos que ponen la seguridad de su comunidad antes que la de ellos; los maestros que trabajan el doble y usan sus propios ahorros para crear un ambiente donde los estudiantes se sientan seguros y puedan aprender, sea remotamente o en persona; el personal de bancos de alimentos asegurando que todos tengan acceso a una comida al final del día. Estas personas nos hacen más tenaces, nos mantienen seguros, y serán la razón por la que podremos dejar atrás esta pandemia más fuertes que nunca.
Estos trabajadores, sin embargo, no pueden hacerlo solos. Será necesaria una acción colectiva de parte de todos para vencer a este virus. Solo trabajando juntos y cumpliendo los lineamientos de profesionales de la salud, como CDC, podremos asegurar que la economía se reponga para todos. El efecto del trabajador de Texas se siente tanto aquí como en el extranjero, y es gracias a su sudor, dedicación y perseverancia que a nuestro estado y nación no los supera nadie. Es por eso que el Día del Trabajo es tan especial para nuestras familias y nuestro país.
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