No entiendo porqué existe tanto odio hacia personas que son "diferentes". La matanza en Orlando fue una tragedia horrenda, un acto sin sentido de odio y violencia. Me siento triste y enojado al mismo tiempo. En lo primero que pensé fue en mi hija. Como orgulloso padre de una hija lesbiana, esa matanza podría haber ocurrido en cualquier lugar. Ese club podría haber estado en San Antonio o Texas Sur. Podrían ser los hijos de cualquiera la próxima vez, simplemente porque son homosexuales.

Solo en el último año hemos avanzado mucho. La Corte Suprema de EE.UU. declaró legal el matrimonio homosexual en los 50 estados. Finalmente la igualdad matrimonial --la libertad de casarse. Pero al mismo tiempo, siento que hemos retrocedido con el incremento del odio y violencia. Aunque los miembros de la comunidad LGBT puedan tener ahora la libertad de casarse, siguen sin tener la libertad de vivir sin miedo al odio y violencia en su contra.

En la historia de nuestro país hemos discriminado, y en muchos casos seguimos haciéndolo, contra mujeres, hispanos, afroamericanos, judíos y gente de otras religiones. Nuestra comunidad LGBT sufre la misma discriminación. ¿Pero porqué? si son humanos como usted o yo.

Hay una desconexión en aquellos que profesan fe religiosa pero hablan contra el derecho de homosexuales. En el nombre de Dios, discriminan contra seres humanos. Pero Dios nos ama a todos. Dios no discrimina. Las parejas del mismo sexo son parte de nuestras comunidades, cultura y país. Viven en nuestras comunidades, trabajan en nuestras comunidades, van a la iglesia en nuestras comunidades, y se unen voluntariamente al ejército donde luchan y se sacrifican por nuestra libertad. Son nuestros hijos e hijas, hermanos y hermanas, amigos y vecinos.

Como sociedad no debemos tolerar actos de discriminación, odio o violencia por ninguna razón. Debemos trabajar juntos para crear comunidades más seguras, para guiar con el ejemplo y ser parte de una solución que proteja el futuro de todos nosotros. Yo sigo comprometido con la igualdad y el tratar a todo ser humano con dignidad y respeto. Debemos permanecer vigilantes contra terroristas, nacionales o extranjeros, que amenazan a nuestra comunidad, y debemos oponernos a la violencia y el odio basado simplemente en que hay gente diferente.

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