Medida busca frenar aumento de tasas de los seguros
(AUSTIN) — Las empresas de seguros no podrían aumentar sus tasas más de 10% sin autorización previa, conforme a un proyecto de ley que se aprobó en el Senado, el miércoles. Según el senador Charles Schwertner, de Georgetown, la suba de las tasas de los seguros de vivienda o automóvil ejercen una presión económica cada vez más grande a los texanos. Según datos de Contraloría, las primas de lo seguros de vivienda aumentaron 50% desde 2015 y, solo en 2023, la tasa promedio aumentó 21%. El panorama que presentan seguros de automóviles tampoco es bueno, dijo el senador, la tasa de automóvil personal aumentó 25% desde 2022. “Como las empresas hacen modificaciones grandes a las tarifas, corresponde que la legislatura se asegure de que el entorno regulatorio considere estas propuestas con el nivel de escrutinio que requieren”.
Los seguros en Texas funcionan con un sistema de "presentación y aplicación", en el que las empresas de seguros presentan un aumento de la tasa ante el Departamento de Seguros de Texas, y luego implementan la nueva tasa de inmediato mientras la agencia revisa y determina si está justificada o no por las circunstancias económicas. Como consecuencia, es posible que los asegurados paguen tasas más elevadas antes de que el estado entre en acción. En 2023, por ejemplo, se presentaron al Departamento casi 3,000 aumentos. De estos, 160 fueron retractados por la empresa y 100 rechazados por razones técnicas, pero ninguno se rechazó por decisión del comisionado. Al exigir que los aumentos de más de 10% se aprueben previamente, como propone el Proyecto del Senado 1643, Schwertner dice que se protege a los consumidores, a la vez que se da tiempo suficiente a las empresas de seguros para reaccionar a las circunstancias del mercado, como desastres naturales, inflación, cambios en los perfiles de riesgo y otras variables que causan cambios a las tasas de los seguros. “Esto otorga cierto grado de flexibilidad a las empresas de seguros de poder reaccionar ante el mercado, al mismo tiempo que protege de aumentos extremos de las tasas sin la supervisión adecuada”, dijo. La medida dispone que los cambios, subas o bajas, de 10% deben contar con aprobación previa. Sin reglas que gobiernen las subas o bajas de las tasas, Schwertner dijo que una empresa sola puede recortarlas de golpe, deshacerse de sus competidores en el mercado y luego volver a subirlas más que antes.
Schwertner también consiguió la aprobación del Proyecto del Senado 1642, que amplía el panel de comisionados del Departamento de Seguros de Texas, de uno a tres. Esto, expresó, busca mejorar la capacidad de respuesta de las agencias tanto por el bien de los consumidores como de las empresas de seguros. “En una agencia reguladora que supervisa un mercado de seguros de $290 mil millones, más que cualquier presupuesto del estado de Texas, una estructura de un solo comisionado presenta desafíos considerables para ejecutar una visión de políticas cohesivas y gestionar las operaciones diarias del departamento”, dijo Schwertner.
El Senado también aprobó otra medida que busca bajar los costos asociados a la vivienda, en esta ocasión entre los adultos mayores y las personas con discapacidad. Aprobado ayer en comité, el Senado consideró y aprobó en el pleno el Proyecto del Senado 23, del senador Paul Bettencourt, de Houston. La medida aumenta el monto que se puede descontar del valor de una vivienda sobre el cual luego se aplica el impuesto, es decir, la exención a la vivienda, a $200,000, para los dueños de más de 65 años o con discapacidad. A esta medida la precede otra, el Proyecto del Senado 4, del senador Bettencourt, aprobada en sesión, que incrementa la exención a la vivienda de $100,000 a $140,000. Dicha iniciativa también permite que los mayores de 65 años y las personas con discapacidad puedan descontar $150,000 del valor al que se le impone el impuesto. En conjunto, estos dos proyectos de exención a la vivienda sumados a la compresión impositiva actual que se aprobó en sesiones anteriores conlleva un ahorro de casi $1,000 en impuestos para las personas mayores, dijo Bettencourt. Esto implica que una “supermayoría” de personas mayores no pagarán impuestos destinados a la operación y mantenimiento de las escuelas, en general, la parte más grande del impuesto anual a la propiedad. El vicegobernador Dan Patrick dijo a los miembros que este es apenas otro paso para darles un alivio fiscal importante a las personas mayores o con discapacidad dueñas de una vivienda en Texas. “Para ponerlo en perspectiva, en 2015, las personas mayores tuvieron una exención a la vivienda de unos $25,000 y, diez años después, una de $200,000”, dijo Patrick antes de la aprobación final de la medida.
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