El Senado aprueba recortes al impuesto a la propiedad por $15 billones

(AUSTIN) — Los texanos recibirán el recorte al impuesto a la propiedad más grande de la historia de acuerdo con una serie de proyectos aprobados de forma unánime en el Senado. El SB 2, del senador Paul Bettencourt, de Houston, aumentaría la exención al impuesto a la vivienda de forma que los dueños puedan descontar $75,000 del valor de la propiedad antes de la valuación impositiva, una medida que, según dijo, les ahorraría en promedio $800 anuales. "Esto es un recorte de impuestos fabuloso, fantástico, para millones de dueños de viviendas de Texas", dijo Bettencourt. Entre los propietarios de 65 años o más, agregó el senador, los ahorros podrían llegar a los $1000, ya que el proyecto triplica la exención especial para personas mayores, lo cual les representaría una exención total de $100,000 sobre el valor de la vivienda. Si la medida se aprueba en la Legislatura, el siguiente paso sería que los votantes lo avalen en las urnas en noviembre. Bettencourt dijo que anticipa la aprobación de la propuesta en las urnas por más del 90% de los votos. El proyecto se aplica de forma retroactiva a este año, así que, si los votantes lo ratifican, los dueños de viviendas verían ahorros en su factura de impuestos a fin de año.

El senador Paul Bettencourt, de Houston, dice que su proyecto bajará al impuesto a la propiedad promedio en $800.

El Senado también aprobó una medida que aumentaría un 20% la exención a la propiedad personal de empresas y brindaría créditos impositivos que cubrirían 20% del impuesto al inventario de las empresas pequeñas. La SB 5, del senador Tan Parker, de Flower Mound, les ahorraría 1.5 billones en impuestos a las pequeñas empresas.

En comité, el miércoles, el Comité de Educación trató dos proyectos considerados prioritarios por el vicegobernador Dan Patrick. El primero, SB 9, del presidente del Comité, el senador Brandon Creighton, de Conroe, es una medida radical que busca ayudar a los maestros de escuelas públicas. "Los maestros están sobrecargados y no se sienten valorados", dijo Creighton. "Esto conllevó a que muchos abandonen la profesión". La medida incluiría un aumento general de $2,000 por año para todos los maestros y $4,000 para los que trabajan en distritos rurales. Los salarios de los maestros rurales están más atrasados que los de sus pares: suelen ganar decenas de miles de dólares menos que el salario estatal promedio de $59,000, dijo Creighton. El proyecto también expandiría la Asignación al Incentivo Docente basado en el desempeño, que los distritos usan para determinar quiénes son los mejores maestros y pagarles más.

Según el senador, las preocupaciones en torno al salario no son la principal razón por la que 77 por ciento de los maestros de Texas alguna vez en los últimos dos años contemplaron dejar la profesión, si no que al tope de la lista estarían más bien cuestiones de seguridad en las aulas y la falta de apoyo. Para darles más apoyo a los docentes, la medida crearía una residencia de maestros. Los estudiantes universitarios que planean ser maestros trabajarían en las aulas un año antes de graduarse, acompañados por maestros mentores. Para mejorar la disciplina, el proyecto facilitaría sacar de las aulas a estudiantes disruptivos o amenazantes, y dispondría que el estudiante debe contar con el consentimiento escrito del docente para poder regresar a clases. "Nuestro objetivo es garantizar que los maestros puedan opinar sobre el plan establecido para los estudiantes disruptivos o peligrosos que entran y salen de las aulas y crean un entorno desfavorable para el aprendizaje", dijo Creighton. El proyecto también les daría a los maestros con niños pequeños la posibilidad de inscribirlos en los programas ya existentes de prekínder en los campus donde trabajan.

Creighton también propuso la medida SB 8, la cual, según dijo, les daría control a los padres sobre la educación de sus hijos a través de las opciones escolares. "La SB 8 ubica a los padres, no al gobierno, en el centro de sus comunidades y de las decisiones que se toman en nombre de sus hijos y de la educación de sus hijos", afirmó. Los estudiantes podrían transferirse libremente entre escuelas de inscripción abierta siempre que haya cupos. Para los padres que quieren mandar a sus hijos a una escuela privada, la medida crearía cuentas de ahorro para educación de hasta $8,000, que sirven para pagar aranceles y matrículas. Los distritos rurales con menos de 20,000 estudiantes recibirían una asignación de $10,000 por año por dos años para todo estudiante que se cambie de una escuela pública a una privada. El proyecto también permite que los padres revisen los materiales de enseñanza y prohíbe que se enseñe sobre orientación sexual e identidad de género en todos los grados.

El Senado se reunirá el jueves, 23 de marzo, a las 11 de la mañana.

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