(AUSTIN) — Se aprobó de forma unánime el proyecto que dispone que las compañías eléctricas tendrán que aclimatar sus instalaciones cruciales o enfrentar duras multas. La propuesta, la SB 3, presentada por el senador Charles Schwertner de Georgetown, implementa una serie de reformas al mercado eléctrico mayorista y minorista que buscan evitar otro apagón de varios días, como el que ocurrió en febrero. Una encuesta reciente de la Escuela Hobby de Asuntos Públicos de la Universidad de Houston halló que más de dos tercios de los texanos incluidos dentro de la red eléctrica se quedaron sin electricidad por, por lo menos, treinta horas, esa semana. Además, la semana pasada, el estado afirmo que se sabe de 111 fallecimientos vinculados a la tormenta. Schwertner dijo a los miembros que, a diferencia de esfuerzos legislativos anteriores, el proyecto actual incluye reformas que buscan impedir que la red eléctrica vuelva a colapsar. “Para nosotros, este es un problema grave, sobre el que tomamos control y responsabilidad; es un problema que vamos a seguir hasta el final”.
El senador Charles Schwertner recibió apoyo unánime para su proyecto, que busca implementar reformas que impidan otro apagón invernal.
El proyecto dispone que las compañías eléctricas, de gas natural y otras energías aclimaten sus plantas para protegerlas de tormentas de una magnitud como la que enfrentó el estado en febrero. Aquellas compañías que no lo hagan o no actúen en buena fe podrían recibir sanciones cada vez más graves, desde una carta de advertencia hasta una multa por un millón de dólares por infracción, por día.
La iniciativa también busca mejorar la comunicación entre los reguladores de energía y el público ante un posible corte prolongado. Según la encuesta de la Universidad de Houston, 81 por ciento de los texanos consideran que no recibieron información en tiempo y forma antes, durante y después de los apagones. “Tenemos alertas del tiempo, alertas de huracanes, alertas ámbar”, dijo Schwertner. “Se crea una ‘alerta de corte’, que hace esencialmente lo mismo, en términos de avisar a los ciudadanos que tienen que tomar ciertas precauciones: agua, comida, combustible, cosas básicas que les hubieran sido de gran ayuda si hubieran sabido que iban a estar cuatro días sin electricidad”. El proyecto establece que la Comisión de Servicios Públicos debe crear una red de alerta de corte eléctrico y diseñar un criterio según el que aplicarla.
Otro tema crucial que surgió durante las investigaciones en torno a los cortes fueron los precios exorbitantes que se facturaron a los prestadores eléctricos cuando el precio mayorista de la electricidad ascendió al máximo legal de 9,000 dólares por más de treinta horas, lo que resultó en costos descomunales. La SB 3 permite mantener el precio máximo, pero dispone que los reguladores deben desarrollar otro límite basado en las condiciones del mercado. Si luego de fijar el precio en el máximo legal por doce horas los reguladores determinan que es necesario seguir, se pasa a un límite de precio menor, más en sintonía con el mercado.
Todavía quedan más medidas por delante respecto a este tema, según el vicegobernador Dan Patrick. “Este trabajo fue apenas un comienzo… pero es un gran primer paso”, dijo. El proyecto será tratado en la Cámara de Representantes.
Además, el lunes, el Senado dio aprobación inicial a la SB 8, que prohíbe el aborto una vez que se detecta el latido del corazón del feto. De acuerdo con el autor del proyecto y senador Bryan Hughes de Mineola, el latir del corazón es prueba de vida humana. “Cuando hay presencia de un latido del corazón, el estado de Texas está diciendo que se trata de un ser humano que merece protección”, dijo. “Vamos a proteger la vida”. Si bien el proyecto no establece un momento específico a partir del que queda prohibido el aborto, el latido de corazón del feto en general se detecta alrededor de la sexta semana del embarazo. Bajo la ley estadounidense actual el aborto es legal hasta la semana veinte. Texas se sumaría a otros once estados que aprueban un “proyecto del latido del corazón”. Todas esas leyes han sido rechazadas en tribunales federales, pero Hughes dijo que piensa que este proyecto cumple con las normas constitucionales porque aplica sanciones civiles, en vez de penales o administrativas. El proyecto debe atravesar una última votación y luego pasará a la Cámara de Representantes.
El Senado volverá a reunirse el martes, 30 de marzo a la 1 p.m.
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