AUSTIN — Quienes deseen ingresar en la cámara o galería del Senado o asistir a una reunión de comité, incluyendo a los senadores, primero deben dar negativo en un test de covid-19 de acuerdo con el reglamento adoptado por el Senado. La pandemia es peor que nunca en Austin: el miércoles, el condado de Travis registró un récord de casos de covid, y los hospitales están cada vez más cerca de su capacidad máxima. El equilibrio entre el derecho del público a acceder al edificio del Capitolio y los riesgos de salud que se presentan a miembros, personal y visitantes ha sido un tema muy debatido en las semanas previas a la sesión. En los siguientes 60 días, por lo pronto, el Senado decidió implementar protocolos estrictos de testeo para evitar un brote en el Capitolio durante el estallido máximo de covid en Austin. El cuerpo legislativo podría considerar modificaciones al reglamento a principios de marzo.

De acuerdo con el riguroso programa de testeo, los senadores y el personal con acceso a la cámara del Senado, en la que los 31 miembros se reúnen, necesitan un test negativo de covid para poder ingresar cada día. El personal sin acceso a la cámara debe ser testeado dos veces por semana. Si bien no es obligatorio para ingresar en el edificio, el estado tiene una carpa en la que ofrece testeo gratuito a miembros del público. Aquellos que den negativo reciben una pulsera que les da acceso a la galería del Senado y les permite asistir a audiencias de comité. Las personas que tengan prueba de que fueron vacunadas también recibirán una pulsera. Cada miembro senatorial decide si hace falta pulsera para ingresar a su oficina en el Capitolio.

Si bien estas reglamentaciones sólo se aplican a los espacios dentro de la jurisdicción del Senado, el vicegobernador Dan Patrick dijo a los miembros que pensaba que los mismos estándares deberían aplicarse a todo el Capitolio. El testeo fue obligatorio para ingresar en el edificio el día inaugural, y Patrick dijo que transcurrió sin problemas: “más de 800 personas hicieron el test y sólo una objetó”. Y agregó: “Las personas saben que, si queremos sesionar, si queremos proteger vidas y la vida, si queremos tratar los asuntos de los ciudadanos con la menor cantidad de restricciones posibles, el testeo es la solución”. Luego agradeció a los miembros por su apoyo unánime.

El testeo es sólo una de las medidas de mitigación que requiere el Senado. Los senadores y el personal deben utilizar mascarilla en la cámara y en los comités, si bien no es necesario que los senadores la utilicen si están sentados solos en su escritorio. Asimismo, los legisladores podrán estar acompañados en la cámara únicamente por un miembro del personal a menos que cuenten con una excepción de parte del presidente del Comité Administrativo. Cualquier persona que dé positivo en la prueba de covid no podrá volver a ingresar en el complejo del Capitolio por diez días.

Es probable que los comités no trabajen a toda máquina hasta transcurridos los primeros sesenta días, pero hay un comité que está avanzando rápido: el Comité Senatorial de Reorganización de Distritos. Cada 10 años, luego del censo, la legislatura debe revisar los cambios poblacionales y redefinir los distritos correspondientes al Congreso nacional, y a la Cámara Alta y Baja estatal. Este año, la información del censo está atrasada y es posible que las cifras finales no estén disponibles hasta más avanzada la sesión o incluso cerca del cierre. A pesar del retraso, Joan Huffman, la senadora por Houston y presidenta del Comité, comenzará a concertar audiencias para escuchar las opiniones de los locales sobre cómo deberían trazarse las nuevas divisiones. Normalmente, estas reuniones se hacen viajando por Texas, pero por la pandemia no fue posible hacerlo en el período provisional.

Huffman explicó que, en lugar de ello, el comité comenzará estas audiencias el último lunes de enero de forma completamente virtual desde la cámara senatorial. Los miembros del comité se sentarán en sus escritorios, ampliamente distanciados, y oirán los testimonios de la región por videoconferencia. La senadora alentó a los miembros del público a participar en donde quiera que vivan. “Nos interesa escuchar a toda persona que se anote y haga el proceso para participar”, dijo Huffman. También hizo hincapié en que estas normas se aplicaban a este comité exclusivamente y no pretendían servir como modelo o precedente para el funcionamiento de otros. Esas normas se decidirán más adelante en la sesión.

El Senado volverá a reunirse el martes 26 de enero a las 3 p.m.

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