(AUSTIN) — La estructura y organización de agencias dedicadas a la atención médica en Texas cambiaría drásticamente bajo una medida aprobada el miércoles por el Senado, aunque ésta no llega a la total consolidación recomendada por una inspección interina. La Comisión Asesora Sunset, un panel legislativo que periódicamente inspecciona el alcance y funciones de toda agencia estatal, recomendó unir las cinco agencias de salud en una sola para reducir la duplicación y mejorar la calidad de los servicios.
La Comisión de Salud y Servicios Sociales (HHSC) ha estado además bajo la lupa esta sesión ante inquietudes surgidas por problemas en la contratación de terceros que hace la agencia. El Gobernador Greg Abbott formó una fuerza de tarea para investigar a la comisión, la que emitió un informe pidiendo demorar la consolidación. La Senadora Jane Nelson de Flower Mound dijo que su medida, la SB 200, toma en consideración algunos aspectos recomendados por esa fuerza de tarea; su propuesta consolidaría tres agencias de manera más gradual, manteniendo otras dos agencias como entidades separadas por ahora.
Bajo la medida, el Departamento de Servicios de Asistencia y Rehabilitación y el Departamento de Servicios a la Ancianidad y Discapacidad serían disueltos y sus funciones transferidas a HHSC durante los próximos dos años. El Departamento de Servicios Familiares y de Protección se mantendría independiente, igual que el Departamento de Servicios Estatales de Salud, aunque Nelson dice que esta agencia concentraría su misión solo en salud pública. Otras provisiones en la medida buscan facilitar el acceso a servicios, eliminar funciones duplicadas o redundantes, y consolidar funciones similares con el fin de aumentar la eficiencia. “Nuestra meta número uno con esta reorganización es facilitarle a los ciudadanos manejarse por lo que es hoy un sistema disfuncional que ya no refleja la realidad de cómo distribuimos los servicios”, dijo Nelson.
También el miércoles el Senado aprobó una propuesta que su autor dice mantendrá a los estudiantes que faltan a la escuela fuera del sistema de justicia en lo criminal. Cuando los estudiantes pierden 10 días de clases en un período de seis meses, o tres días en períodos de cuatro semanas, pueden enfrentar una multa de $500 más gastos judiciales, así como una marca negativa y permanente en su registro de estudiantes. El presidente del Comité Senatorial de Justicia en lo Criminal, Senador John Whitmire, dijo que más de 100,000 jóvenes recibieron citaciones judiciales por inasistencias en 2014. El senador agregó que muchas veces estas inasistencias son resultado de circunstancias que están fuera del control de los padres o el estudiante. “Debemos mantener el sistema de justicia en lo criminal para aquellos que realmente lo merecen”, dijo Whitmire. Su medida SB 106 terminaría con la norma de extender citaciones judiciales por inasistencia escolar. Según la propuesta, los distritos escolares deberían designar un especialista en inasistencias y crear programas uniformes que las prevengan y combatan. También instituiría una serie gradual de multas, empezando por $100 por la primera ofensa.
Otra medida aprobada el miércoles por el Senado reduciría el tiempo de espera para que los padres puedan solicitar se intervenga una escuela deficiente. La ley actual permite a los padres hacer una petición al estado para reformar una escuela, si ésta ha sido evaluada como deficiente por cinco años seguidos. La SB 14 del presidente del Comité Senatorial de Educación Larry Taylor reduciría ese límite de tiempo a tres años. Permitiría que una mayoría de padres eleve una petición al Director de Educación para que remedie la situación, con consecuencias que van desde la reconstitución del personal de la escuela hasta cerrarla y transferir sus estudiantes a otra escuela dentro del distrito.
El Senado vuelve a reunirse el jueves 16 de abril a las 11:00 am.
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