AUSTIN – Texas encabeza a la nación en el número de habitantes no asegurados, con más de cinco millones de personas sin cobertura, y los legisladores continúan el esfuerzo de la pasada sesión tratando de disminuir ese número. Tanto la Cámara de Representantes como el Senado aprobaron medidas para redistribuir fondos y crear planes opcionales para ayudar a los no asegurados a obtener cobertura médica auspiciada por sus empleadores. Esos pacientes no cubiertos son una pesada carga para el sistema estatal de salud, sumando 11.3 billones de dólares en servicios médicos impagos por año. El miércoles, el Comité de Supervisión Legislativa a la Reforma de Medicaid se reunió para escuchar a funcionarios de Salud y Servicios Sociales sobre el progreso de las reformas aprobadas en la pasada sesión.
En el 2007, los legisladores aprovecharon una reestructuración en los fondos federales para Medicaid que da mayor libertad a los estados para usar esos fondos. La medida SB 10 de la Senadora Jane Nelson, copresidente del Comité de Supervisión Legislativa a la Reforma de Medicaid, trata la reforma a Medicaid de cuatro maneras. Primero, la medida busca aumentar la atención básica y preventiva para mantener a los tejanos sanos y libres de condiciones crónicas que representan la mayor carga en el gasto de salud. Segundo, crearía una fuente de oportunidades para subsidiar primas y deducibles de seguros para los tejanos no asegurados a través de planes médicos de sus empleadores. Tercero, cambia la manera en que Texas usa los dólares de salud federales y estatales para aprovechar al máximo este financiamiento, y, finalmente, busca actualizar y expandir la necesaria infraestructura médica.
Los miembros del comité también recibieron testimonio sobre diferentes paquetes de beneficios de aseguradoras y funcionarios de hospitales. Los legisladores examinarán los modelos de mejores prácticas probadas en el estado y la nación entera, para diseñar un óptimo paquete de beneficios que sea económico pero brinde una buena cobertura médica.
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