El miércoles, 1 de junio, el vicegobernador de Texas, Dan Patrick, asignó al senador estatal Royce West (D-Dallas) al recién formado Comité Senatorial Especial para Proteger a Todos los Texanos. El comité especial, creado por el vicegobernador luego del pedido del gobernador de Texas, Greg Abbott, tiene como tarea estudiar cuestiones vinculadas a la seguridad en las escuelas tras la masacre fatal en Robb Elementary School en Uvalde, Texas, en la cual diecinueve niños y dos maestras de cuarto grado fueron brutalmente acribillados por un individuo de dieciocho años que utilizó un rifle de asalto de uso militar.

El senador West le agradeció al vicegobernador el nombramiento, a la vez que exhortó a sus colegas senadores y miembros del comité a superar las diferencias ideológicas y examinar con seriedad todas las causas y factores que contribuyen a los tiroteos masivos.

“Es imprescindible que debatamos con sinceridad en lo que respecta a la intención de la Segunda Enmienda, ahora teniendo en cuenta un contexto en el que hay rifles de asalto de uso militar en manos de civiles, y en numerosas ocasiones, en manos de quienes no deberían tenerlos”, dijo el senador West. “Otros temas que habría que tratar son los períodos de espera obligatorios antes de comprar ciertas armas de fuego y el hecho de que la mayoría de los texanos y estadounidenses apoyan la verificación universal de antecedentes.

“Además, únicamente reforzar la seguridad en las escuelas no es la panacea que terminará con los tiroteos escolares”, dijo el senador. “Me preocupa que, sin un debate sobre medidas de sentido común para reglamentar las armas, elaboremos un informe que no proporcione las directrices necesarias de cara a la sesión legislativa de 2023 y, aun más importante, que no les dé seguridad a los padres al momento de mandar a sus hijos a la escuela ni libertad a las personas al transitar por lugares públicos tan comunes en la vida cotidiana”.

El senador West, quien en el pasado ocupó el cargo de fiscal general de delitos penales en el condado de Dallas, presentó un proyecto de ley para prohibir las armas de asalto en su primera sesión legislativa, en 1993. Lleva casi treinta años defendiendo medidas de sentido común que regulen las armas, escribiendo y apoyando proyectos que instauren la obligatoriedad del seguro del gatillo, que eliminen vacíos legales vinculados a los espectáculos de armas y que prohíban la compra de armas a través de terceros por quienes no pueden hacerlo legalmente. La salud mental, al igual que la seguridad de las escuelas, añadió el senador, son componentes necesarios de un debate sustancioso que tiene por objetivo proteger a todos los texanos, pero no son los únicos.

El senador West explicó que es necesario revisar la eficacia de las consignaciones hechas en el presupuesto estatal, incluidas las que son parte de la Consignación para la Seguridad Escolar y para el Centro de Seguridad Escolar de Texas. “Si bien la Legislatura consignó fondos a fin de reforzar las escuelas, es posible que haga falta que los votantes aprueben bonos para sumar medidas de seguridad adicionales”, dijo el senador.

“Un diálogo sobre seguridad escolar, su fortalecimiento y salud mental que no se ocupe de las consecuencias que tiene en la sociedad la proliferación de las armas no nos conducirá a una solución para garantizar la seguridad de los estudiantes y el personal escolar”, concluyó West. “Espero con ansias discutir estas cuestiones con los integrantes del comité y demás colegas en los próximos días. Nuestra misión debe ser dejar la política de lado y enfocarnos en salvar vidas”.

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