En la guerra ningún soldado sale ileso.

Estas conmovedoras palabras de José Narosky nos ayudan a entender los tremendos sacrificios hechos por los veteranos militares de nuestro país.

Estos hombres y mujeres deben estar primeros en nuestra mente este Día de los Veteranos. El feriado de hoy comenzó en 1919 como Día del Armisticio, marcando el aniversario del fin de la I Guerra Mundial, y fue ampliado en 1954 para rendir honor a todos los veteranos.

Texas es el hogar de más de 1.5 millón de veteranos de todo tipo. Estos valientes americanos arriesgan su vida y pasan largo tiempo lejos de sus familias para proteger las libertades que disfrutamos. Su valor y patriotismo son testamento inspirador de nuestro carácter nacional.

Las bellas palabras de Narosky deberían recalcar la importancia del apoyo a nuestros veteranos, incluyendo el asegurar que tengan acceso a la educación, vivienda, trabajo y atención médica. De esa manera, siempre es un placer para mí promover la atención a sus necesidades en el Senado de Texas.

Mi plegaria es porque todos los tejanos agradezcan a los veteranos por su servicio, y les rindan honor no solo hoy sino todos los días.

¡Que Dios bendiga a nuestros veteranos, y que Dios bendiga a Texas!

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